No era mala idea, antes de Beasties Boys, la electrónica de raster-noton… pero está claro, el montaje era para Sónar de día, no porque los beats, bombos y ruidos de los alemanes no valiesen para bailar… no, sino que seguro que en Sónar de Día le hubiesen dado más importancia al montaje audiovisual, tan importante como el sonido en esta propuesta. ¿proyectar sobre tela negra y plasmas? me pareció bastante cutre… creo que a ellos también… pero detrás estaba todo el aparataje de led, percusión y amplificadores transparentes de los de Nueva York.

Estas son las cosas que pasan en los festivales modernos… en todo caso una propuesta como siempre arriesgada, que intenta decir eh! el ruido blanco también es bailable. Además era de estreno así que un notable para Alva Noto y los suyos…

Siete años atrás, Frank Bretschneider, Carsten Nicolai y Olaf Bender iniciaron una colaboración a tres bandas que significó el primer episodio de Signal. Hoy, este buque insignia de Raster-Noton sigue explorando los confines del minimalismo, las frecuencias palpitantes y la improvisación audiovisual.