What is No Noise?
As we become increasingly bombarded with information and stimulation, the world is becoming a noisier place. In an initiative that goes beyond retail, we invite you to celebrate the power of quiet, see the beauty in function and find calm among the crowds.

Allí podrás comprar ropas sin marcas, entrar en el ultralounge, habitación silenciosa (celda post-consumista, por pervertir a Beatriz Preciado). La idea de que el sielncio es confort, ha sido el lema de determinda clase social anglosajona desde principios del s XX, pero viene de antes. Los sibaritas, me contaba Xabi Erkizia hace bien poco, son el resultado de esto.

Síbaris era conocida en la Antigüedad por su gran riqueza. De ella se contaban cosas tales como que había canales que llevaban el vino directamente del campo a la ciudad y que no se dejaba trabajar a los herreros y carpinteros porque el ruido que producían resultaba molesto. Sus ciudadanos eran famosos por regodearse en sus riquezas y porque no soportaban la más mínima incomodidad. Aún hoy, se llama «sibarita» a quien lleva una vida de refinamiento y sensualidad.

Fue fundada hacia finales del siglo VIII a.C. por colonos griegos procedentes de Hélice, en Acaya, y de Trezena, en la Argólida. Llegó a contar, con el tiempo, con varios centenares de miles de habitantes.

Selfbridges, en Oxford Street, es un buen ejemplo de lujo rancio/cool que dice tanto sobre el papel de los objetos de la cultura contemporánea. Hace poco todos los escaparates eran una obra de Yayoi Kusama, aprovechando el tirón, o perpetraando una maniobra de publicidad en connivencia de la exposición en la Tate Modern de Londres.

El silencio se vende como confort en Oxford Street, como medida de austeridad sensorial para el exceso de rudio. Nada menos.
Lo que a mi me ha parecido muy interesante es que ya había un area de descanso en 1909 cuando Harry Gordon Selfridge montó los almacenes. Mr.Selfridge, autor de libros sobre el comercio y pionero en el uso de la publicidad en los almacenes, pertenece a la clase social que está detrás de las luchas contra el ruido, y que ya a finales del s.XIX hacían sinónimo entre la tranquilidad y la distinción.
El silencio, como lujo de unos pocos.
En 1933 una revista sobre salud publica los primeros documentos sobre la Anti-Noise League británica. Esta publicación, estaba en una tradición de tratados contra el ruido que daría inicio también en los treinta, en Chicago, ciudad a la que pertenecía la adinerada familia de la mujer de Mr.Selfridge. En la imagen de la izquierda, podemos ver uno de los números de la revista Quiet, publicada por esta misma liga británica contra el ruido.
Claro está que el silencio que hoy se vende es otro, pero sigue siendo sinónimo de distinción y lujo. Es también un buen ejemplo sobre como nuestras ideas sobre algunas realidades sonoras afectan configuraciones sociales y políticas.